El uso de retenedores después de un tratamiento de ortodoncia es esencial para mantener los resultados obtenidos. Aunque muchas personas creen que el trabajo termina al quitar los brackets o alineadores, en realidad, esta etapa es clave para garantizar que los dientes no vuelvan a su posición original. En nuestra Clínica Dental en Los Ángeles conocemos sobre esto, por eso aquí te explicamos cuándo y por qué es importante usar retenedores.
¿Qué son los retenedores y por qué son importantes?
Los retenedores son dispositivos diseñados para mantener los dientes en su nueva posición después de la ortodoncia. Durante el tratamiento, los dientes se mueven gracias a la presión constante ejercida por los brackets o alineadores. Sin embargo, una vez que se retira el aparato ortodóntico, los dientes tienden a regresar a su posición inicial debido a la memoria del tejido periodontal y óseo.
Por esta razón, estos dispositivos actúan como un “seguro” para evitar que el esfuerzo y tiempo invertido en el tratamiento se pierdan.
¿Cuándo comenzar a usar los retenedores?
El uso de retenedores debe comenzar inmediatamente después de terminar el tratamiento de ortodoncia. Tu ortodoncista te proporcionará los dispositivos y te indicará cómo usarlos según tu caso.
Por lo general, los primeros meses son cruciales, ya que los dientes son más propensos a moverse. Durante este tiempo, es probable que se te recomiende usarlos de manera continua, excepto al comer o realizar tu higiene bucal.
¿Por cuánto tiempo se deben usar?
El tiempo necesario para usar retenedores varía según cada persona, pero hay algunas pautas generales:
- Primeros 6 meses: Usarlos todo el día, excepto para comer o cepillarte.
- Después de los primeros 6 meses: Usarlos únicamente durante la noche.
- A largo plazo: En muchos casos, se recomienda usar retenedores nocturnos de por vida para evitar cualquier desplazamiento dental.
Tipos de retenedores y su mantenimiento
Existen dos tipos principales de retenedores:
- Removibles: Son fáciles de usar y limpiar, pero requieren disciplina para llevarlos el tiempo indicado.
- Fijos: Son alambres adheridos a la parte trasera de los dientes. Son más discretos y no requieren esfuerzo consciente para usarlos, pero necesitan una higiene bucal rigurosa.
Sea cual sea el tipo, es importante mantener los retenedores limpios para evitar la acumulación de bacterias y mantener una buena salud bucal.
Consecuencias de no usarlos
No seguir las indicaciones de tu ortodoncista sobre el uso de retenedores puede resultar en el movimiento de los dientes hacia su posición original, conocido como recidiva. Esto podría requerir un nuevo tratamiento de ortodoncia para corregir el problema.
Los retenedores son la clave del éxito a largo plazo
Su uso adecuado después de la ortodoncia asegura que tu sonrisa se mantenga alineada y saludable con el tiempo. Si tienes dudas sobre cuánto tiempo debes usarlos o cómo cuidarlos, consulta siempre con tu ortodoncista.